Guerra por el Canon de la SGAE

La batalla abierta por el canon de la SGAE, recrudecida por la Ley de Propiedad Intelectual (o Ley Sinde, como ya se conoce), continúa en su “escalada armamentística” entre la SGAE, el ministerio de Cultura y un amplio sector de la población, asociaciones, instituciones y empresas privadas que se han declarado totalmente en contra, través de acciones como El Manifiesto 'En defensa de los derechos fundamentales en Internet' o todoscontraelcanon.com, entre otras.

Como si las declaraciones de Teddy Bautista no fueran suficientes (declaró que la ley Sinde “era inteligente, pero no sabía si era una solución buena”, en cuanto que otros países habían aprobado leyes más duras; al parecer, le gusta más el modelo francés…), siguen goteando nuevos datos que añaden más leña al fuego: recientemente hemos sabido que las universidades están obligadas a abonar un 10% sobre el coste de cada organización de eventos musicales o teatrales y 16,54€ por cada película o documental proyectado en las aulas (fines culturales y educativos…). Por lo visto, la SGAE llega, incluso, a pedir a las tunas su repertorio de canciones para pasarles la factura correspondiente (no es broma). El caso de la Universidad de Valladolid es sangrante: más de 200.000 euros que debe pagar en concepto de derechos.

Pero esto no se queda aquí, las asociaciones de internautas plantan cara, animando a los ayuntamientos a recuperar el dinero del canon digital desde 2008 (por la compra de soportes y equipos informáticos), tras difundirse el consejo de la Unión Europea de eximir a los ayuntamientos del pago de cánones cuando se trate de actividades culturales sin ánimo de lucro. Esta acción está comenzando a dar sus frutos y varias alcaldías están comenzando a alzar la voz: el Alcalde de Castelló ha criticado públicamente el cobro del canon por las actividades sin ánimo de lucro que se organizan desde el ayuntamiento, liderando la protesta general de los consistorios ante el pago de un canon que consideran injusto.

Por supuesto, Teddy Bautista ha contraatacado diciendo que “revisar la Ley es inútil”, convencido de que pronto habrá una Directiva Europea que impulse una regulación comunitaria sobre los derechos de autor. Y mientras, para dejar claro que esto va “pa’lante”, Cultura ha recomendado a las gestoras de derechos de autor reclamar el canon por obras con el sello “Creative Commons”, es decir, obras cuyos autores las han cedido gratuitamente al mundo para difundir la cultura, argumentando que el canon debe cobrarse con independencia de si el autor quiere o no quiere sacar un beneficio económico de su obra.

Artistas como Sergio Dalma o Lian Gallagher han criticado las medidas que se están tomando en los distintos gobiernos y a sus propios compañeros. Sergio Dalma declaró hace poco que la SGAE era “una mafia bestial” y Lian Gallagher ha dicho recientemente que “no soporta a los artistas que lloriquean por la piratería”. Éstos son dos ejemplos entre muchos que se están produciendo en los últimos tiempos.

Es un conflicto en pleno apogeo, y será una larga contienda: la regulación de la propiedad intelectual es un reto difícil y puede que inalcanzable, por la misma naturaleza de internet, pero no parece que las soluciones propuestas vayan a obtener grandes resultados si la sociedad las considera injustas y sigue rechazándolas frontalmente.

(imagen de puntoradio.com)